Para
algunos padres el retorno a las clases presenciales es la mejor noticia
que les puedan dar; mientras que para otros es un conjunto de
preocupaciones, entre ellas cómo preparar a sus hijos para el regreso de
una forma que ya perciben desfasada y hasta quizás aburrida. En muchos
casos, la virtualidad es la realidad que ellos prefieren.
Ante
este complicado panorama que tiene a más de uno dándole vueltas a la
mente, en busca de una respuesta, hemos consultado a expertos en el área
de educación que sirva para que aquellos padres que se encuentran tal
situación puedan encontrar una orientación al respecto.
paciencia, la tolerancia, la empatía y el trabajo en equipo entre la
familia y la escuela serán los mejores aliados en este reto. (
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Para la psicóloga escolar Leslie Amell Bogaert, M.A
, lo principal que hay que tener en cuenta para iniciar el año escolar
con buen pie es fortalecer desde ya las necesidades emocionales de los
hijos; tal como deberán hacer los maestros una vez se inicie la
docencia. «Dejemos lo académico para más adelante, que sin la salud
mental y emocional no se logra el aprendizaje».
Explica,
la también psicopedagoga, que para lograrlo es necesario aplicar la
paciencia, la tolerancia, la empatía y el trabajo en equipo que debe
existir entre la familia y la escuela.
La
experta detalla que tanto padres como maestros deben prepararse para
diferentes situaciones que se pueden presentar, para identificar
necesidades, apoyar y contener:
1. Rutinas de sueño y alimentación alteradas.
2. Ansiedad, miedo a salir, miedo a contagiarse.
3. Niños y jóvenes que se cansan muy rápido (sedentarismo, falta de ejercitación).
4. Niños muy apegados a sus padres (ansiedad de separación).
5. Síndrome de abstinencia por adicción a dispositivos electrónicos.
6. Niños y jóvenes acostumbrados a la virtualidad, les gustaba más o les fue mejor.
7. Dificultades para reconectar socialmente.
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A
pesar de que no tenemos todo el tiempo del mundo para diseñar
estrategias que sirvan de ayuda para que los hijos retomen la
presencialidad sin tener que pasar por un difícil proceso de adaptación,
es posible hacerlo. Para ello Ana Reyna,
M.Ed Educación y directora académica del centro educativo La Casita de
Belén, recomienda a los padres comenzar a cortejar a los hijos.
Pone
como ejemplo realizar actividades con tal finalidad, como mirar fotos
escolares, recordarles momentos importantes, enumerar las posibilidades
de actividades que se pueden hacer estando juntos. Pero también
explicarles que la virtualidad se usa para ocasiones específicas, pero
que la normalidad consiste en que tengamos unos buenos años de
asistencia escolar presencial, en los que socializamos y desarrollamos
no solo capacidades académicas, sino habilidades para la vida.
Los
padres deben estar conscientes de que la prioridad en estos momentos,
en víspera del regreso a clases, la prioridad es motivar, ser positivos,
transmitir seguridad, emoción y tranquilidad a sus hijos, entiende la
experta; mientras resalta que «un padre equilibrado emocionalmente para
bien, llevará a su hijo de la mano para que sienta lo mismo».
No
obstante, Reyna considera que hay una cantidad significativa de
estudiantes a los que les entusiasma volver a las aulas presenciales y
en ellos la tarea es fortalecer y no dejar perder ese estado de ánimo y
esperanza
«Para cualquiera de los dos casos, los centros
educativos deberán preparar un plan de acción, tomando siempre en
cuenta, el núcleo familiar».
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Las recomendaciones generales de la ejecutiva escolar son las siguientes:
1. Disfruta cada proceso. Esto
implica desde buscar los uniformes hasta forrar los libros. Hace un
año, anhelábamos estar haciendo lo que hoy podemos realizar. Seamos
agradecidos y que se nos note.
2. Revisa la vista, audición y peso de tu hijo. Visitar
al pediatra de cabecera resulta de suma importancia en este momento.
Las pantallas y el encierro pudieron afectar a nuestros niños en alguna
área. Todos deben ser evaluados integralmente ,y de ser necesario,
referirse al especialista que corresponda.
3. Busca una institución educativa que quiera trabajar contigo. Vuélvete amigo de la escuela, y haz de ese espacio el segundo hogar de tu hijo, de esa manera todo será más fácil.
Desde el punto de vista de Nancy Patricia Canó, M.S.
Psicóloga clínica, educadora y asesora educativa, si los padres
entienden que su hijo se ha quedado rezagado en su desarrollo del
lenguaje, motor, cognitivo y/o en sus habilidades sociales, como
consecuencia de este año y medio diferente, es importante que se pongan
en contacto con los profesionales del centro educativo para que juntos
elaboren un plan de acción que permita promover las destrezas en el niño
o el joven.
“La finalidad es que los estudiantes sean felices en
este y en todos los procesos que les toque enfrentar. Podemos asegurar
que, si los padres se involucran de forma activa, se lograrán los
objetivos con muy buenos resultados ya que la familia es el agente
promotor por excelencia del desarrollo infantil”, dice.
Nancy Patricia Canó
nos deja algunos consejos para que los padres trabajen positivamente el
pre inicio y desarrollo de este de vuelta a clases
- Garantizar un ambiente de armonía y paz en el hogar.
- Verificar la propuesta educativa, los programas y protocolos que ofrecerá el centro educativo de su elección.
- Cumplir con el protocolo de salud y seguridad establecido por el centro.
- Participar en el proceso de adaptación de su hijo. En especial si el niño o joven asiste a un nuevo centro educativo.
- Transmitir a los niños y jóvenes seguridad y confianza en este nuevo proceso.
- Ser flexibles y empáticos con su hijo, con los profesores y con el equipo de gestión del centro educativo.
- Colaborar activamente con los profesores en lo que sea oportuno y requerido.
- Promover
el desarrollo de la inteligencia emocional de su hijo. Que el niño o
joven sea capaz de regular sus emociones e identificar las de los demás,
para actuar según las mismas. - Desarrollar
actividades divertidas con su hijo cada tarde/noche según su edad.
Realizar actividades sensoriales, cantar, bailar, pintar y manipular
materiales para expresarse creativamente contribuye a regular las
emociones. - Propiciar frecuentes contactos con la naturaleza. La naturaleza nos brinda el espacio perfecto para lograr armonía y bienestar.
- Conectar
lo que el niño o joven está aprendiendo en el centro con experiencias
directas de la vida diaria, para ayudarle a poner en práctica sus
conocimientos. - Involucrar a su hijo en actividades extracurriculares de su interés.
- Mantener a los profesores y a los directivos del centro informados sobre el desarrollo emocional de su hijo.
- Definir espacios de reflexión en el hogar y participar todos en programas de acompañamiento emocional.
- Asistir
a terapia si siente que su hijo necesita ayuda profesional para
acompañarle en esta nueva etapa, proceso de adaptación o para
sobrellevar las diversas situaciones vividas en este proceso de
pandemia. - CREDITOS A DIARIO LIBRE