Antes de aprobar el ajuste a los salarios mínimos del sector privado no sectorizado en 2025, el Comité Nacional de Salarios (CNS) debe partir de una «base lógica» para evitar efectos negativos en las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes).
Así
lo expresó Fernando Pinales, presidente de la Confederación Dominicana
de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Codopyme), quien advirtió que
muchas mipymes, con márgenes de ganancia limitados y en constante lucha por sobrevivir, enfrentarían mayores costos laborales
en un contexto de alta tasa de cambio (62 pesos por dólar). Esto podría
obligarlas a reducir personal, aumentar precios o, en el peor de los
casos, cerrar operaciones, como ha ocurrido con cada incremento
salarial.
Pinales destacó que la transferencia de estos costos al consumidor podría generar un efecto en cadena, elevando los precios de bienes y servicios y exacerbando la inflación en un entorno de baja productividad.
Millones de trabajadores serían beneficiados del aumento salarial al sector privado no sectorizado.
El dirigente empresarial también alertó que muchas empresas, al no poder asumir los nuevos costos, podrían migrar hacia la informalidad para reducir cargas laborales, lo que afectaría la recaudación fiscal y dejaría a muchos trabajadores desprotegidos.
«La informalidad ya ronda el 60 % y sigue aumentando con cada medida de este tipo», subrayó.
En ese sentido, advirtió que el crecimiento de negocios informales, sin cumplimiento de normativas laborales ni fiscales, afectaría la competitividad de las empresas
formales y debilitaría la capacidad del Estado para garantizar la
sostenibilidad de la seguridad social, incrementando la vulnerabilidad
de los trabajadores.
Dialogo tripartito
Las
declaraciones de Pinales se dan en el contexto de las discusiones que
lleva a cabo el CNS, que ya ha realizado cuatro convocatorias y dos
reuniones en busca de consenso para el ajuste salarial de este año.
Codopyme coincide
con lo planteado por la Confederación Patronal de la República
Dominicana (Copardom). Su presidenta, Laura Peña Izquierdo, explicó que
el documento entregado al CNS detalla los indicadores
clave que deben considerarse para un reajuste. «Hoy hicimos una
presentación en la que analizamos el contexto macroeconómico, la inflación acumulada en los últimos dos años y otros factores que impactan la economía«, indicó Peña Izquierdo.
Asimismo, los empresarios expusieron un análisis sobre la productividad laboral y su evolución en la última década. «También abordamos el tema de la informalidad en la economía«, agregó.
Peña Izquierdo aseguró que la propuesta final, con un porcentaje específico de aumento, será discutida el próximo lunes 24 de febrero.
Creditos Diario Libre.